
El país europeo que amenaza con expulsar a 5.000 brasileños hasta por la fuerza

Portugal ha experimentado un fuerte aumento en el número de solicitudes de residencia rechazadas en las últimas semanas. Según anunció el ministro de la Presidencia, António Leitão Amaro, actualmente 33.983 inmigrantes han sido notificados para abandonar el país, ya sea por su propia voluntad o, si fuera necesario, mediante expulsión forzosa.
La cifra representa un salto significativo respecto a los 18.000 casos que se conocían hasta hace poco. Entre los afectados, destacan 5.386 ciudadanos brasileños.
Durante una conferencia de prensa dedicada al balance del primer año del Plan de Acción para las Migraciones, el ministro explicó que la Agencia para la Integración, Migraciones y Asilo (AIMA) está enviando unas 2.000 notificaciones diarias.

El ministro explicó que el proceso "comenzó a acelerarse" la semana pasada,porque está "en proceso de emisión semiautomática".
Posible expulsión forzosa
Los datos revelaron que la mayoría de los migrantes afectados provienen del subcontinente indio. Encabezan la lista los ciudadanos de India (13.466), seguidos por personas de Bangladés (3.750), Nepal (3.279) y Pakistán (3.005), además de grupos significativos de ciudadanos suramericanos.

Leitão Amaro recalcó que el marco legal portugués ofrece la opción de "salida voluntaria" tras la notificación, pero que si no se respeta este paso, se activa un procedimiento que puede concluir en expulsión forzada, coordinada junto con las fuerzas de seguridad.
"Esta notificación, bajo el régimen portugués, permite la retirada voluntaria y solo da lugar a la expulsión forzosa tras un nuevo procedimiento", explicó.
La AIMA evaluó ya 184.059 de más de 440.000 expedientes de residencia, vinculados a la extinta modalidad de manifestación de interés, mecanismo que permitía a extranjeros que entraban como turistas o sin visado específico de residencia, solicitar la regularización de su situación y obtener un permiso de residencia legal para trabajar.
De estos, 150.076 fueron aprobados y casi 34.000 rechazados, lo que indica que la tasa de denegación se ubica en 18,5 %, es decir, que cerca de uno de cada cinco solicitantes tuvo una respuesta negativa.