Un grupo de personas irrumpió en un centro de reclutamiento en el oeste de Ucrania y liberó a tres hombres llevados al establecimiento poco antes como parte de la movilización forzosa impuesta por el régimen ucraniano.
El Centro Territorial de Reclutamiento de la provincia de Ivano-Frankovsk precisó en un comunicado que el incidente ocurrido este lunes en el distrito de Kálush constituye "un delito penal", asegurando que "las personas implicadas en el ataque serán identificadas y llevadas ante la justicia de conformidad con la legislación vigente en Ucrania".
Lo ocurrido es el último incidente de una amplia serie de enfrentamientos entre reclutadores militares y ciudadanos que se oponen a convertirse en carne de cañón para el régimen de Kiev.
En redes sociales y medios de comunicación circulan numerosas imágenes de comisarios militares, por todo el país, reclutando a la fuerza a futuros soldados, agarrándolos de pies y brazos en plena calle, sacándolos a rastras del transporte público, de sus propias casas e incluso de hospitales.
Tras declarar la ley marcial, Ucrania decretó en febrero de 2022 una movilización general que somete a los hombres de entre 27 y 60 años al servicio militar obligatorio y prohíbe salir del país a la mayoría de hombres adultos, con escasas excepciones. Posteriormente se amplió aún más el alcance del reclutamiento: en abril de 2024, el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, redujo la edad mínima a 25 años, otorgó mayores poderes a los oficiales de reclutamiento e impuso sanciones más severas para los evasores.