Estados Unidos ya ha programado su primera prueba de un misil balístico intercontinental capaz de llevar armas nucleares, pero desarmado, desde el anuncio hecho por el presidente Donald Trump, informó Newsweek el lunes, citando al Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea del país norteamericano.
El próximo lanzamiento de prueba de un misil estadounidense Minuteman III podría ocurrir entre el miércoles y el jueves, dijo a la revista Marco Langbroek, profesor de la Facultad de Ingeniería Aeroespacial de la Universidad Tecnológica de Delft en los Países Bajos, que analizó advertencias de navegación.
Dicha arma está programada para ser lanzada desde la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California y alcanzaría el Sitio de Pruebas de Defensa de Misiles Balísticos Ronald Reagan en las Islas Marshall, en el Pacífico Central, junto con cinco zonas de escombros designadas.
Si se confirma, la trayectoria de vuelo sería similar a un lanzamiento de prueba anterior realizado en mayo, cuando un misil desarmado voló aproximadamente 6.700 kilómetros sobre el océano Pacífico, y también marcará la segunda vez desde septiembre que las fuerzas nucleares de EE.UU. llevan a cabo una prueba. Hace poco más de un mes, un submarino disparó cuatro misiles balísticos Trident II D5 Life Extension desarmados en el océano Atlántico frente a Florida.
Rusia responderá simétricamente
Además, se trata de la primera prueba de misiles balísticos de EE.UU. desde los comentarios del presidente Donald Trump hechos el pasado jueves, cuando ordenó iniciar ensayos nucleares "de inmediato". El anuncio del mandatario llegó después de que Rusia informara sobre una serie de pruebas con sus armas innovadoras de propulsión nuclear, como Burevéstnik y Poseidón, aunque desde el Kremlin destacaron que no se trató de ensayos nucleares en absoluto.
Al día siguiente, el inquilino de la Casa Blanca afirmó que tomó tal decisión "debido a los programas de pruebas de otros países". "Sí, otros países lo hacen. Si ellos lo hacen, nosotros también lo haremos", indicó a los periodistas, sin dar más detalles al respecto.
En este contexto, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, hizo hincapié en que la postura de Moscú acerca del tema es que, si algún país se aparta de la moratoria unilateral y voluntaria de abstenerse de los ensayos nucleares, Rusia actuará de acuerdo con la situación y responderá simétricamente.


