Tiburones feroces estremecen el Oriente Lejano de Rusia
La temporada de sol y playa ha terminado antes de lo previsto en el Oriente Lejano ruso. El pánico ha cundido en la zona. En los últimos días se han producido dos ataques de tiburón en el distrito de Primorie. Esta noticia causó conmoción en el país, ya que estos escualos nunca antes habían sido una amenaza en las playas del Oriente Lejano.
"El gran tiburón blanco se alimenta normalmente de focas, peces mielgas y leones marinos. Parece ser que los confundió con seres humanos", dice Vladímir Dolganov, empleado del Instituto de Biología del Mar.
El primer ataque tuvo lugar este miércoles, la víctima fue un joven de 25 años. Su estado es grave, perdió las manos aunque su vida no corre peligro. Los médicos dicen que lo rescataron a tiempo.
"Cuando sacaban a este joven del agua fue horrible, ni siquiera puedo describirlo. Le faltaban las manos de los dos brazos, todo el barco estaba lleno de sangre", comenta Alena Semiónova, testigo del accidente.
Los habitantes de la zona tenían la esperanza de que este fuera un caso aislado. Pero un día después, la historia se repitió y ahora muchos empiezan a pensar que se trata de un verdadero tiburón antropófago. En el segundo incidente, un adolescente de 16 años sufrió heridas en las dos piernas.
"Escuchamos sus gritos: '¡Ayúdenme, ayúdenme, un tiburón!' Unos chicos saltaron a las lanchas neumáticas, trajeron al herido y le prestaron ayuda", cuenta otro testigo.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia ha prohibido bañarse, bucear y usar atracciones acuáticas en las playas de Primorie hasta que se investiguen las causas de estos ataques tan poco habituales. La gente ya ha recibido instrucciones.
Si tienen la mala suerte de encontrarse con un tiburón, mejor no intentar escapar. Es prácticamente imposible. Estos peces pueden alcanzar una velocidad de 40 kilómetros por hora. Los socorristas recomiendan un método inusual para salvarse. Darle un golpe en los ojos o en la zona de las hendiduras respiratorias.
Las autoridades siguen buscando al peligroso animal cuya longitud, según los testigos, supera los dos metros. Mientras, los habitantes del Oriente Lejano ruso tendrán que olvidarse de la playa y buscar otros sitios para refrescarse en estos días calurosos.