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OTAN: “No hay evidencias” de crímenes de EE.UU. en la provincia afgana de Wardak
La coalición liderada por la OTAN en Afganistán ha declarado que no ha encontrado ninguna prueba que apoye las acusaciones de que los soldados de EE.UU. estuvieran involucrados en el abuso de civiles en la conflictiva provincia afgana de Wardak.
La declaración se realizó después de que el Gobierno afgano ordenara la retirada de las fuerzas estadounidenses de la provincia en dos semanas tras acusar a sus soldados de haber creado “grupos armados ilegales” responsables de torturas y asesinatos.
El portavoz de la OTAN, el brigadier general Gunter Katz, afirmó que la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad no encontró pruebas de que las fuerzas extranjeras participasen en los crímenes pero no hizo ningún comentario sobre los afganos presuntamente vinculados a los estadounidenses.
"Tomamos en serio todas las acusaciones de conducta indebida y hacemos todo lo posible por esclarecer los hechos. Durante las últimas semanas se han producido varias denuncias de conducta poco profesional de las fuerzas especiales en Wardak", dijo Katz. No obstante, subrayó que "hasta ahora, no hemos encontrado ninguna evidencia que apoye estas afirmaciones".
El presidente afgano, Hamid Karzai, emitió la orden de retirada de las tropas de EE.UU. de la provincia después de que en una reunión del Consejo de Seguridad Nacional el gobernador de Wardak, Abdul Majid Khogyani, y otros funcionarios locales denunciaran los supuestos crímenes de los soldados norteamericanos en la zona. Aseguraron que las tropas estadounidenses entraban en hogares de civiles y detenían a ciudadanos sin motivo y alegaron que los afganos que trabajaban para las fuerzas especiales estadounidenses estuvieron involucrados en torturas y asesinatos.
El portavoz de la OTAN, el brigadier general Gunter Katz, afirmó que la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad no encontró pruebas de que las fuerzas extranjeras participasen en los crímenes pero no hizo ningún comentario sobre los afganos presuntamente vinculados a los estadounidenses.
"Tomamos en serio todas las acusaciones de conducta indebida y hacemos todo lo posible por esclarecer los hechos. Durante las últimas semanas se han producido varias denuncias de conducta poco profesional de las fuerzas especiales en Wardak", dijo Katz. No obstante, subrayó que "hasta ahora, no hemos encontrado ninguna evidencia que apoye estas afirmaciones".
El presidente afgano, Hamid Karzai, emitió la orden de retirada de las tropas de EE.UU. de la provincia después de que en una reunión del Consejo de Seguridad Nacional el gobernador de Wardak, Abdul Majid Khogyani, y otros funcionarios locales denunciaran los supuestos crímenes de los soldados norteamericanos en la zona. Aseguraron que las tropas estadounidenses entraban en hogares de civiles y detenían a ciudadanos sin motivo y alegaron que los afganos que trabajaban para las fuerzas especiales estadounidenses estuvieron involucrados en torturas y asesinatos.
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